Clarisonic, ese famoso sistema de limpieza facial que en EEUU ha causado furor (la propia Oprah Winfrey se ha declarado fan incondicional de este beauty gadget), aterrizó hace unos meses en nuestro país para deleite de las beauty victims y todas aquellas personas que quieren mejorar la calidad de su piel en poco tiempo.
Este sistema viene avalado por miles de dermatólogos y con una tasa de ventas elevadísima, más de 5 millones vendidos en EEUU. Un cepillo que, sin duda, ha creado expectación a su llegada y que despierta curiosidad y algunas dudas que espero poder despejar en este post.
Tan sólo es necesario un minuto al día para mejorar la calidad de la piel
La limpieza es el paso más importante en el cuidado de la piel, una correcta eliminación de impurezas, grasa, maquillaje... consigue una piel más sana y que los productos de tratamiento que apliquemos a continuación den mejores resultados.
Un equipo de ingenieros de Seattle se planteó la necesidad de renovar los sistemas de cuidados de la piel existentes en el mercado logrando desarrollar un sistema innovador con una tecnología revolucionaria. Gracias a su patentado método sónico, avalado por reputados dermatólogos de todo el mundo, Clarisonic consigue retexturizar la piel, minimizando poros abiertos y líneas de expresión y logrando una piel más luminosa y suave.
Pero, ¿qué es exactamente Clarisonic? Es un sistema de limpieza que, a diferencia de otros cepillos rotatorios que pueden dañar las fibras de la piel, cuenta con un método de tecnología sónica que trabaja con suavidad en la piel. Su cabezal oscila a una frecuencia sónica de más de 300 movimientos por segundo eliminando exceso de sebo e impurezas. No vibra y no rota. Se ha demostrado que es 6 veces más eficaz que una limpieza manual.
Podemos encontrar en el mercado 3 cepillos Clarisonic diferentes:
1) Clarisonic Pro: Disponible únicamente en centros profesionales del sector de la estética.
2) Clarisonic Plus: Además de cabezal facial, incluye un cabezal corporal y cuenta con 3 velocidades, es de mayor tamaño que Mia 2 e incluye una base de apoyo que sirve como cargador del aparato. Ofrece tres programas de 1 minuto de duración y otro de 2 minutos en la limpieza facial. En corporal de 3 minutos. Su precio es de 225€.
3) Clarisonic Mia 2: Sólo incluye cabezal facial, es más pequeño y manejable que Clarisonic Plus y cuenta con 2 velocidades. No tiene base de apoyo y únicamente dispone de un programa facial de 1 minuto. Su precio es de 149€.
También existen 5 cabezales diferentes para aclopar al cepillo Clarisonic:
1) Cabezal para pieles delicadas: En color azul e indicado para pieles muy sensibles o secas.
2) Cabezal para pieles sensibles: En color blanco, puede utilizarse en cualquier tipo de piel incluidas las pieles sensibles.
3) Cabezal para poros dilatados: También en blanco pero con uno de los aros de cerdas del cepillo en color verde. Indicado para pieles con los poros muy visibles.
4) Cabezal para pieles normales: En color gris, para pieles normales y sin imperfecciones.
5) Cabezal para cuerpo: Sólo disponible para Clarisonic Plus y Clarisonic Pro.
Cada cabezal de recambio tiene un precio de 25€ al igual que las limpiadoras específicas de Clarisonic.
¿Cómo usar Clarisonic? Nada más adquirir Clarisonic el primer paso fundamental es cargar el aparato al menos durante 24 horas, este paso es sumamente importante para que la vida del gadget sea óptima. Con la batería cargada tiene una autonomía de 28 minutos, dado que sólo es necesario 1 minuto para la limpieza facial (y 3 minutos para la corporal que se activa automáticamente al insertar el cabezal), usándolo una vez al día tendríamos prácticamente para un mes con una sola carga.
Una vez desmaquillado manualmente el contorno y maquillaje de los ojos, o bien humedeciendo el rostro o bien el cepillo aplicaríamos nuestra limpiadora habitual en la piel o en el cabezal. Una vez hecho esto se presiona el botón de encendido, seleccionaríamos la velocidad y comenzaríamos por la zona de la frente. El sistema tiene 1 minuto programado dividido en 4 partes, una de 20 segundos destinada a la frente, otra segunda de otros 20 segundos para nariz y mentón y dos de 10 segundos una para cada mejilla. Estas 4 fracciones de tiempo están delimitadas por un sonido que va guiando al usuario a lo largo del ciclo. Iríamos pasando de una zona a otra siguiendo esa guía sonora deslizando el cepillo con movimientos circulares suaves sobre la piel. Una vez termina ese ciclo de 1 minuto el sistema se apaga automáticamente.
Después de la limpieza facial sólo tendríamos que lavar el cabezal con agua y jabón para eliminar cualquier residuo. El cepillo es estanco así que podemos lavarlo sin problemas al igual que meterlo en la ducha para realizar nuestra limpieza corporal o de rostro porque no afectará al correcto funcionamiento del sistema.
La marca recomienda una vez a la semana retirar el cabezal para limpiar el mango del cepillo con agua tibia y jabón. Para asegurar su eficacia se recomienda cambiar el cabezal cada 3 meses si lo usamos a diario.
Mi experiencia con Clarisonic
Mi piel es muy sensible, reactiva, tengo dermatitis seborréica en la frente y dermatitis atópica en el resto del rostro, además de rosácea. Es mixta-seca con tendencia a deshidratarse fácilmente. Ahora con el embarazo se desequilibra con facilidad pero la verdad es que estoy logrando controlarla muy bien entre tratamientos y productos y la tengo en estos momentos bastante fenomenal.
Al tener una piel tan sensible los cepillos faciales siempre me han dado un poco de miedo por pensar que pueden resultar agresivos, irritar mi piel y alterarla de alguna manera. Me decidí a utilizar Clarisonic por la buenísima fama que tiene y por la recomendación de tantísimos profesionales dermatólogos. El cabezal que elegí por supuesto fue el de pieles delicadas, el azulito indicado para pieles muy sensibles o secas. Pues bien, llevo 4 meses utilizando Clarisonic a diario, todas las noches, algo que creí impensable porque sinceramente me temía que tendría que usarlo 1 o 2 veces en semana si me resultaba un poco "duro" para mi frágil piel. Todo lo contrario, desde el primer día de uso me deja la piel sin rastro de rojeces ni irritación, me resulta extremadamente suave, además de ser un limpiador muy eficaz que deja la piel libre de impurezas y suavísima. Con el uso se revela una luminosidad y una calidad de la piel muy mejorada, retexturizada e incluso más fuerte, cada día me noto la piel mejor, además noto como los productos que aplico después potencian sus efectos.
Clarisonic deja la piel suavísima, limpia, yo lo utilizo como segundo paso, es decir, realizo una primera limpieza con agua micelar con la ayuda de un algodón y después humedezco el cepillo del cabezal y pongo un poco de mi limpiadora habitual para iniciar el ciclo de un minuto de mi Clarisonic Plus. Es un sistema que engancha porque notas la piel muchísimo más limpia que con una limpieza manual, queda mucho más suave y lisa. Ojo que de verdad engancha!
¿Habéis probado Clarisonic?
¿Qué os parece este sistema sónico tan revolucionario?